En la mitad de sus días
Cuando el rey Ezequías enfermó de muerte, vino a él un profeta de parte de Dios, que le dijo: “Ordena tu casa, porque morirás, y no vivirás” (Is. 38:1). Ante tal noticia, Ezequías se afligió sobremanera y dijo: “A la mitad de mis días iré a las puertas del Seol; privado soy del resto de […]