Cincuenta es el número de la salvación y se encuentra como trescientas veces en la Biblia.

En Génesis 18 leemos de la visita de Jehová a Abraham, y de la intercesión de éste, rogándole a Jehová que perdonara a Sodoma si había 50 almas justas en ella. Luego pidió que si no los había, todavía perdonara la ciudad. Se valió de los números de la gracia y la salvación. Bajó a 40, 30, 20 y hasta 10 almas. Tal vez Abraham temía sobrepasar sus límites, o confiaba en que Dios hallaría no menos de 10 personas justas en Sodoma, y que Lot y su familia serían salvos.

En el Nuevo Testamento, el Espíritu Santo descendió en el Día de Pentecostés, 50 días después de la Pascua, y 3000 almas se salvaron en un día.

En el año 50 era el del Jubileo, el año de liberación. Al tomar Canaán, Josué dividió la herencia entre las 12 tribus, por familias. Las porciones debían ser posesión perpetua, es decir, mientras vivieran en obediencia a Jehová. Sólo en caso de extrema necesidad se podía vender la porción de la familia, y no perpetuamente. Debía devolverse a la familia originalmente dueña en el año del Jubileo. Si su pobreza exigía la venta de una propiedad 10 años después del año de liberación, la podían vender sólo para los siguientes 40 años, hasta otro jubileo.

Por su bondad, Jehová dio esta ley para evitar la pobreza exagerada de los menos afortunados, y el enriquecimiento excesivo de los prósperos. Aunque fuera vendida una propiedad, la Ley permitía que un pariente la redimiera, pagando lo que restaba hasta el año del Jubileo (Lev. 25:23-28). La misma Ley incluía el caso de la persona vendida en servidumbre (Lev. 25:47-55).

Hamán conspiró para exterminar la raza israelita (Est.3). Por supuesto, era cosa imposible, como Hitler y otros han aprendido (Jer. 31:35-37). Hamán llegó hasta el punto de conseguir un permiso y decreto real, y ordenó la construcción de una horca de 50 codos de alto, para ahorcar a su enemigo Mardoqueo. ¿Dónde hay salvación en la historia? En que Dios salvó a su pueblo, y en que Hamán fue ahorcado en la misma horca de 50 codos de altura, que tenía preparado para Mardoqueo, el judío.

El arca de Noé tenía 50 codos de ancho y es un tipo de Cristo. Era amplia para que cupieran todos los que tenían fe y voluntad de entrar en ella. La puerta de salvación en Cristo es amplia para recibir a todos los que quieran confiar en él. ¡Qué lástima y qué dolor que multitudes quitan sus ojos de la Puerta abierta, y escogen el camino que conduce a la perdición eterna!

Tomado de Manual de Interpretación Bíblica, E. Hartill.